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Hugo Morán, Secretario de Estado de Medio Ambiente, visita la Planta de Humana en Leganés
13-05-2021
Humana ha recibido hoy en sus instalaciones de Leganés (Comunidad de Madrid) la visita de Hugo Morán, Secretario de Estado de Medio Ambiente, acompañado de Ismael Aznar, Director General de Calidad y Evaluación Ambiental.
Durante su visita a la Planta de Preparación para la Reutilización de textil de la Fundación, Morán se ha mostrado muy interesado en la gestión del residuo textil y en su gran potencial de valorización y reutilización, así como de generación de empleo verde. En 1998 el propio Morán, en calidad de Alcalde de Lena, rubricó un acuerdo con Humana para la recogida de textil en el municipio asturiano. 23 años después, el Secretario de Estado ha tenido la ocasión de visitar las instalaciones de la Fundación.
La visita ha permitido a Morán conocer de primera mano la labor que se lleva en esta planta que, unida a la instalación colindante, conforman el complejo más grande de España dedicado a gestión de este residuo, con 10.000 metros cuadrados de superficie y un equipo de 100 personas, entre especialistas en procesamiento de textil y personal de los Departamentos Centrales de la organización. El complejo cuenta con una capacidad máxima anual de procesamiento de 18.000 toneladas de textil, mediante un sistema semi-mecanizado cuyo objetivo es obtener el máximo aprovechamiento del residuo.
El destino de las prendas preparadas para su reutilización es:
- El 53% se destina a reutilización: el 14% a través de las tiendas secondhand de Humana en España y el 39% se exporta, principalmente a África, para ser vendido a precios bajos y así generar recursos para la cooperación al desarrollo.
- El 36,5% se encuentra en un estado que no permite su reutilización por lo que se vende a empresas de reciclaje textil para que elaboren otros productos como mantas, aislantes o trapos para la industria de automoción.
- El 2% son residuos impropios (plástico, cartón, otros) que se pone en manos de los gestores autorizados correspondientes.
- El 8,5% no se puede reutilizar ni reciclar ni valorizar energéticamente y se envía a un centro de tratamiento de residuos para su disposición final.
Obligatoriedad de la recogida selectiva de textil a partir de 2025
El 1 de enero de 2025 la recogida selectiva de textil usado será obligatoria en toda la UE. Este hecho, unido a la futura Ley de Residuos y Suelos Contaminados, son una oportunidad y un enorme reto para dar el impulso definitivo a la gestión apropiada de este recurso, fieles a la jerarquía de residuos y a un modelo económico circular, en el que prime la reintroducción del textil en la cadena productiva, prolongando su ciclo de vida.
El horizonte 2025 y los objetivos de la UE son, al mismo tiempo, el estímulo fundamental para que empiecen a formularse diversas iniciativas que derivarán en un Sistema Colectivo de Responsabilidad Ampliada del Productor (SCRAP). Humana permanece muy atenta a estas posibles iniciativas que deben surgir desde los productores de textil, con el fin de que tengan en cuenta y se nutran de la experiencia acumulada por los gestores autorizados. El futuro SCRAP y los productores pueden y deben aprovechar el know how de los actuales gestores de textil para crear un sistema integrador, con la competitividad y la profesionalidad como bandera.
El camino por recorrer es largo y los plazos, cada vez más cortos: cada español desecha 25 kilos de textil cada año, según el propio Ministerio de Transición Ecológica y Reto Demográfico. Ello supone más de un millón de toneladas anuales. Solo un 15% es recuperado por un gestor autorizado. El resto acaba vertido, por tanto, de modo indebido. Según la Comisión Europea, por cada kilo de ropa recuperado y no conducido a un centro de tratamiento de residuos, se dejan de emitir 3,169 kg de CO2.
Beneficio social de la gestión sostenible del textil
El objetivo de Humana es que la recogida selectiva de ropa usada y su preparación para la reutilización se consoliden como parte fundamental de la gestión de residuos. Al obtener el máximo aprovechamiento posible del textil y darle una segunda vida, favorecemos un modelo de economía circular. Convertimos los residuos en recursos y les dotamos de un fin social ya que las prendas que se recuperan son un activo que, gestionado debidamente, se convierte en motor de empleo y de generador de fondos para la cooperación al desarrollo en el hemisferio Sur y de apoyo local y agricultura urbana y social en nuestro país. Así contribuimos a una sociedad económica y socialmente más sostenible.
